¿Cuál es el verdadero "Faro del fin del mundo"?

Faro Les Eclaireurs

famoso faro cercano a Ushuaia

es el que siempre se visita en las excursiones marítimas

Faro San Juan de Salvamento

conocido como el Faro del fin del Mundo

no se visita con excursiones marítimas

Faro Les Eclaireurs

54° 52' S, 68° 05' W

Altura de la estructura: 11 m

Altura del foco sobre el nivel del mar: 22 m

Puesto en servicio: 23/12/1920

En servicio 

Fuente: www.geocities.com/lu7cc

 

Faro San Juan de Salvamento

54° 43' S, 63° 51' W

Altura de la estructura: 6 m

Altura sobre el nivel del mar: 60 m

Puesto en servicio: 25/05/ 1884

Desafectado al servicio: 1902

Reconstruido y en servicio: 1998  

Fuente: www.geocities.com/lu7cc

 

Es normal encontrar personas que llamen al Faro Les Eclaireurs como el "Faro del fin del mundo". Sin embargo, no existe ningún faro con esa nomenclatura sino una novela de Julio Verne que lleva ese título. Los hechos de ficción relatados en este libro suceden sin lugar a dudas en la Isla de los Estados y no en el faro cercano a Ushuaia por el simple hecho de que cuando se publica la novela éste último todavía no se había construido.

 

 

El Libro

Autor: Julio Verne (1828 – 1905)

Género: Clásicos / Ficción / Literatura Juvenil / Aventuras

Publicado: 1905

Resumen: Cerca del cabo de Hornos, en uno de los estrechos más peligrosos del mundo para la navegación, el gobierno argentino decide instalar un faro que oriente a los navíos que se arriesgan a pasar del Atlántico al Pacifico por aquellas latitudes próximas a la Tierra de Fuego.

El faro se construye en la isla de los Estados, lugar tan aislado como desolado, lo cual a contribuido a que la gente del mar llame al ingenio "el Faro del Fin del Mundo".

Tres marinos deben cuidar del faro durante un trimestre: vida solitaria y aburrida durante noventa días. Y así habría sido si unos ladrones de barcos naufragados no hubiesen formado una terrible banda y decidido apoderarse del faro para conseguir presas fáciles y con absoluta impunidad.

 

 

 

 

La Isla de los Estados

Fuente: www.iccc.es/2006/11/16/el-faro-del-fin-del-mundo

 

La Isla de los Estados es una pequeña isla ubicada en el Atlántico Sur al este de la Isla Grande de Tierra del Fuego. Fue descubierta por Shouten y Le Maire el 25 de diciembre de 1615, quienes la llamaron País de los Señores de los Estados. El capitán holandés Hedrick Brouwed la rodeó por completo en 1643. La isla tiene una longitud aproximada de 65 kilómetros, su parte más ancha mide 16 kilómetros y la más estrecha unos 500 metros, y su superficie, incluida la de las islas adyacentes (Año Nuevo al Norte, Dampier y Menzies al Sur), es de unos 530 kilómetros cuadrados.

Conocedor de lo peligroso de los mares circundantes, el marino argentino Luis Piedrabuena, quien había rescatado ya a un grupo de náufragos alemanes, construyó en 1862 el refugio de San Juan de Salvamento cerca de la bahía (casi fiordo) llamada puerto Cook.  

 

Historia del Faro  

Fuente: www.iccc.es/2006/11/16/el-faro-del-fin-del-mundo

El faro de la Isla de los Estados fue inaugurado el 25 de mayo de 1884 por una Expedición de la Armada Argentina al mando del Coronel Lasserre (la misma que fundaría Ushuaia el 12 de octubre del mismo año). Fue el segundo faro que tuvo Argentina.

Está ubicado a los 54º 43′ 24″ de latitud Sur y 63º 47′ 1″ longitud Oeste de Greenwich, alumbrando un sector de 94º.

 

Construído a 60 metros sobre el nivel del mar, funcionaba en un edificio circular, con una altura de 6 metros, y estaba hecho de madera de lenga. No se trataba de un faro tradicional: la cabina era octogonal, con dos sus lados (que daban al mar) cubiertos de gruesos cristales, tras los cuales se colocaban las 7 lámparas a petróleo que lo iluminaban.

En el interior había algunos camarotes, unos con cuchetas para que durmieran los marineros, y otros para depósito. Las paredes eran de madera y el techo de zinc.

Sólo funcionó hasta 1902, sustituido por otro en la isla Observatorio (llamada Isla de Año Nuevo por James Cook, dado que llegó allí por primera vez el 1º de Enero de 1775.). Su luz se apagó y cayó en el olvido hasta 1975, año en que fue nombrado monumento nacional argentino.

 

 

 

La historia de su reconstrucción se inició con la presentación efectuada por el Sr. André Bronner, presidente de la asociación “El Faro del Fin de Mundo” (Association “Le Phare du Bout du Monde”) a la Secretaría de Cultura de la Presidencia de la Nación.

Bronner conoció la Isla de los Estados, en un viaje de “iniciación” en abril de 1993 y desde ese momento soñó con el proyecto hoy hecho realidad.

Ciento doce años después de su instalación en la Isla de los Estados, el faro del Fin del Mundo sería reconstruido ni más ni menos que por un navegante, con el apoyo económico del Municipio de Nantes, Francia, donde nació Julio Verne y del Municipio de La Rochelle, donde reside Bronner. Por su parte el Municipio de Ushuaia declaró la iniciativa de interés municipal, comprometiéndose a brindar todo el apoyo necesario.

El jueves 26 de febrero de 1998 finalmente fue inaugurado el nuevo Faro del Fin del Mundo en la Isla de los Estados.

Este es el faro que sirvió como inspiración a Julio Verne para escribir la que sería su novela póstuma, El Faro del Fin del Mundo. Fue publicada por primera vez en 1905, veintiún años después de la construcción del faro en San Juan de Salvamento.

 

Julio Verne

Fuente: http://literatura.itematika.com/escritor/1/julio-verne.html

Nació el 8 de febrero de 1828 en Nantes (Francia). Fue un joven rebelde y propenso a la aventura. Desde muy pronto siente inclinación por los viajes. Intenta fugarse en un navío hacia la India cuando cuenta once años, su padre consigue detenerle en el mismo barco y le aplica un severo castigo: azotado con un látigo y encerrado a pan y agua. Pero lo que más le duele es la promesa que se le obliga a pronunciar: nunca pretenderá viajar más que con la imaginación. Cursó estudios de leyes en París. En 1856 conoce a Honorine de Vyane, con la que contrajo matrimonio en 1857 tras establecerse en París como agente de bolsa. Entre 1848 y 1863 se dedicó a escribir libretos de ópera y obras de teatro. Su primer éxito le llegó cuando publicó Cinco semanas en globo (1863), un éxito fulminante gracias al cual firmó un espléndido contrato con el editor P. J. Hetzel, que le garantizaba la cantidad anual de 20.000 francos durante Los siguientes veinte años, a cambio de lo cual, se obligaba a escribir dos novelas de un nuevo estilo cada año. El contrato fue renovado por Hetzel y más tarde por el hijo de éste, con el resultado de que, durante más de cuarenta años, Los voyages extraordinales aparecieron en capítulos mensuales dentro de la revista MAGASIN D'EDUCATION ET DE RECREATION. Escritor al que le encantaba la ciencia y los inventos en el siglo XIX. Documentaba sus aventuras y predijo acertando muchos de los logros científicos del siglo XX. Escribió sobre cohetes espaciales, submarinos, helicópteros, aire acondicionado, misiles dirigidos e imágenes en movimiento, mucho tiempo antes de que aparecieran. Entre sus libros hay que destacar Viaje al centro de la tierra (1864), De la tierra a la luna (1865), Veinte mil leguas de viaje submarino (1870), La isla misteriosa (1870) y La vuelta al mundo en ochenta días (1872). Autor de más de ochenta libros que han sido traducidos a 112 idiomas. Sus obras han sido llevadas al cine. Tuvo mala salud que durante toda su vida, sufrió ataques de parálisis, era diabético y acabó por perder vista y oído. Fue agredido por uno de sus sobrinos, que le disparó un tiro a quemarropa dejándolo cojo. En 1892 fue distinguido con la Legión de Honor. Falleció el 24 de Marzo de 1905. Enterrado en el cementerio de la Madelaine de Amiens su lápida reproduce un sugerente epitafio "Hacia la inmortalidad y la eterna juventud".

 

comentarios a: Gerardo Scolari